Desarrollo, educación y humanismo

Resumo

Para todos es evidente que el mundo en que vivimos se hace cada vez más estrecho para acoger la creciente población mundial. Esta presiona por todos lados para satisfacer de algún modo sus urgentes necesidades. Para todos es evidente que el mundo en que vivimos se hace cada vez más estrecho para acoger la creciente población mundial. Esta presiona por todos lados para satisfacer de algún modo sus urgentes necesidades. Los pueblos buscan en el desarrollo "l'élan vital" de su solución. Por desgracia, la interpretación unívoca de este término, muchas veces, se agota en el sólo bienestar económico, importante y necesario, indiscutiblemente, pero portador intrínseco y solapado de las más grandes injusticias sociales. Esta interpretación promueve conscientemente o no el bienestar, a veces, hasta la opulencia de algunos, enfrentados a la pobreza y miseria, no pocas veces, de las grandes masas de población - recordemos los extremos casos de países africanos, asiáticos, y de nuestra América-. Pensamos que esta sola variable de reflexión, entre otras muchas del mismo orden y relevancia, justifica de sobra un poderoso llamado de alerta para detenernos a considerar nuestro lugar que, como humanos, nos corresponde ante la inevitable violencia que engendra la concentración desigual de la riqueza. Hay un vacío aquí y una palabra que ofrecer de los que no puede ausentarse una Universidad como ésta, cuyo objetivo principal es la formación de Profesionales de la Educación. Problemas como la esencia del ser humano, el valor de lo humano, el rol de la educación, las relaciones sociales, políticas y económicas, como sus justos equilibrios, los fundamentos antropológico-filosóficos del existir y quehacer humanos, las responsabilidades de la familia, de las comunidades, del estado, de las empresas privadas y públicas, constituyen temáticas centrales que, aunque diferentes en sus respectivos ámbitos, deben ser tratadas desde una perspectiva integrada e integradora.